Los dos casas propuestas siguen la idea de la suma y redistribución de sus terrenos a lo largo de una fila. La construcción tuvo que respetar las condiciones de altura máxima permitida para los edificios de la zona y adaptarse a la topología existente. Las dos casas están situadas en altura, disfrutando del ancho total de la nueva parcela (12 metros), siendo éste el beneficio de unir los dos terrenos originales de 6m cada uno.
El nuevo terreno tiene una pendiente de aproximadamente 5 metros de altura y se une a la vía pública en tres de sus cuatro lados. De esta manera, una de las casas saca el máximo provecho de la parte inferior de la parcela mediante la creación de un jardín y su adaptación a la topografía (“Casa Tierra”) y la otra, en la parte superior se abre hacia el campo disfrutando de una vista panorámica de las montañas (“Casa cielo”).
La Casa Tierra toma la forma de un pedestal construido enteramente de piezas de cerámica combinada con elementos de colores. El módulo de cerámica pretende ser algo más que la fachada de la Casa Tierra, que se construye con la intención de formar el módulo principal del proyecto. Éste establece las diversas particiones de las dos casas y entrega diferentes grados de transparencia y de luz, que se obtienen a través de las cerámicas para cava de vino de la marca comercial Collado.
La Casa Cielo está estructuralmente compuesta de hormigón, con el apoyo de otro módulo en su parte inferior y revestida en vidrio reflectante.
Gran parte de las perforaciones son tapadas con azulejos multicolores de loza, lo que permite a la fachada cumplir sus necesidades funcionales. Sin embargo, en el resto de las zonas, los agujeros no están cubiertos, formando un entramado que permite diferentes puntos de vista dependiendo de la posición del espectador.
Los azulejos se distribuyen de acuerdo a un patrón de decoloración que pone el color verde en la zona inferior, como una continuación del jardín y la decoloración del color azul en la parte superior, creando una armonía con los colores del cielo. Otras se utilizan en la fachada para explicar sutilmente los nombres de cada una de las casas, cielo y tierra.
Programáticamente, la Casa Tierra ofrece una amplia gama de usos y beneficios a través de su condición excavada, mientras que la Casa cielo se configura como un espacio de ocio gracias a las vistas panorámicas.
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| LOCALIZACION: Torreagüera, Murcia |
| ARQUITECTO/S: Javier Peña Galiano |
| PROYECTO: Torreagüera Atresados |
| CLIENTE: DSL BUILDING S.L |
| ESTRUCTURAS: IDEEE (Eduardo Díez) |
| ARQUITECTO/s TÉCNICO/s: Jesus Tornero Molina |
| AREA:346.66 m2 |